LIBRO AZUL

Poemas de aquel cuaderno azul que escribía en mi adolescencia, que han sido publicados en el libro "Luz de soledad":

Amanecer en Cuenca:
Cuenca era la calle donde vivíamos com mi padre, madre y hermanos, en el barrio de Villa del Parque, ciudad de Buenos Aires. Nos mudamos en el año 1969. Era un piso 14º, depto. C. Allí el amanecer se veía en todo su esplendor y el sol entraba a raudales por la ventana de mi habitación que estaba orientada hacia el Este. En días claros se veía la costa de Uruguay...
En esa calle Cuenca viví hasta los veinte años en que me fui a la Patagonia, en pareja y a poblar el Sur. ¡Cuántas veces extrañé esos amaneceres! Únicos, dadores de fuerza, libertad y energía.

Primer amor:
Este poema se lo escribí a mi primer novio Jorge Ricardo Vázquez. Salí con él desde los catorce años hasta los diecisiete. Él me llevaba cinco años así que fue quien me enseñó lo que era el amor en la adolescencia, en aquellos años en los que el respeto primaba y los encuentros secretos en algún rincón oscuro eran los más anhelados. Cuando lo recuerdo siento una gran ternura, todos momentos gratos, ninguna pelea. Un ser bueno, algo tímido y muy bien parecido. "Jorge, Jorge...¿Dónde estarás ahora?" Este poema que salió de la pluma de una niña enamorada da el nombre al segundo capítulo del libro.

Sin vos:
También, a Jorge. Cuando finalmente estando ya en quinto año del secundario, decido dejarlo. Estaba aburrida de tanto compromiso ya que él quería hacer planes para casarse y yo me asusté...Lo quería aún pero necesitaba libertad. Creo que nunca me perdonó pues nos queríamos mucho.

Recomenzar:
He contado que a los veinte años me fui en pareja a la Patagonia. Sucedió que mi novio de entonces Hugo Lorenzo, consiguió un trabajo en Chubut....¡Qué tristeza estar sin él!...Buenos Aires estaba helada en su ausencia...Seis meses de tristeza que fueron los más tristes que puedo recordar. Fui a verlo una vez en ese tiempo de separación. Recuerdo que tomé el avión y me fui a Trelew a visitarlo. Fue entonces que decidimos vivir juntos. En esa época no se concebía el vivir juntos sin una libreta de por medio así que a fin de año nos casamos. Pero como amor de juventud, duró poco, no llegamos a dos años y sobrevino la separación. Este poema lo escribí cuando estando ya sola, recordaba a Hugo, mi marido por accidente, mi primer gran decepción.

Recuerdos del mar:
Fue en el sur donde me quedé aún después de separarme de Hugo. Puerto Madryn era un sitio donde iba mucho. Es un puerto que tiene magia. Un golfo de aguas cristalinas, sin oleaje debido a que está muy reparado y donde una ciudad por entonces pequeña, besa las playas de arena matizada de piedritas brillantes...Todo un otoño e invierno del año 1980, concurrí a un taller literario y escribí, entre otros este poema.

Reposo:
Otro poema de aquella época de tallerista patagónica en la que el "Libro azul", como lo bautizara, aún estaba en vigencia...

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